Catalina Riquelme
Profesor: Yonatan González
La eugenesia desde su comienzo significó muchas cosas diferentes para muchas personas diferentes. Históricamente, el término ha sido usado para cubrir cualquier cosa relacionada con el cuidado prenatal de las madres, la esterilización forzada e incluso con la eutanasia. En el pasado tuvieron lugar muchos debates, algunos de los cuales continúan en la actualidad, sobre qué se considera exactamente parte de la eugenesia.
El concepto de Eugenesia ha estado presente desde tiempos remotos. Un ejemplo de esto corresponden a las ideas de Platón, quien creía que la reproducción humana debía ser controlada por el gobierno. Platón registró estos puntos de vista en “La República”, donde afirmaba «que los mejores cohabiten con las mejores tantas veces como sea posible y los peores con las peores al contrario»
Como habíamos mencionado anteriormente, podemos distinguir entre dos tipos de eugenesia:
Si tomamos la eugenesia desde un punto de vista positivo, se podría mejorar la calidad de vida de algunas personas. De esta forma, podríamos darles la posibilidad de vida a todas aquellas personas que debido a una falla genética poseen enfermedades de carácter grave y que los limitarían de por vida.
Muy relacionado a lo anteriormente dicho, tenemos también el hecho de que se podrían eliminar algunas enfermedades genéticas existentes en el mundo.
Por otro lado, siguiendo la línea de la creación de seres inteligentes, esta sería una consecuencia positiva de la eugenesia, puesto que se podría facilitar el desarrollo de nuevas tecnologías.
Ahora, enfocándonos el aspecto negativo, la eugenesia ha generado muchas muertes alrededor del mundo de personas que fueron consideradas como “débiles”, sin siquiera tener la posibilidad de tener una vida normal.
Siguiendo con el mismo tema, la eugenesia coartó la posibilidad de algunas parejas para tener hijos, o les prohibió el matrimonio.
Casi todos los países occidentales no católicos adoptaron algunas leyes eugenésicas.
La eugenesia comenzó su decaimiento posterior a la segunda guerra mundial, debido a la estrecha relación que guardaba con las intenciones de Adolf Hitler, fue entonces cuando se establecieron los derechos humanos.
En relación a la eugenesia se estableció un punto en su Artículo 16 que «Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia», aludiendo específicamente a lo sucedido en esta guerra y muy similar a lo que ocurría en Canadá o Suecia.
La iglesia promueve la ciencia genética, pero condena la eugenesia.
El año 2009 el obispo Rino Fisichella, presidente de la Academia Pontificia para la Vida declaró que “la investigación puede crecer y debe avanzar, pero lo mismo debe hacer la conciencia ética”, queriendo decir con esto que no debe dejarse de un lado la ética por el avance científico, mas aun cuando como el mismo dijo, los avances han permitido detectar y curar miles de enfermedades hereditarias, evitando así males congénitos , además es capaz - a nivel prematrimonial- de verificar riesgos de ser portadores sanos de patologías, e incluso de intervenir a nivel prenatal, siendo este el punto de inflexión, ya que esto presenta problemas de carácter ético.
También el obispo claramente en representación de la iglesia, critico la mentalidad egoísta y discriminadora de creer que hay personas que tienen menos valor que otras, ya sea por su condición social o por causa de su condición física.
Además hay que reconocer la influencia que ha ido adquiriendo y por ende la cantidad de personas que la apoya crece cada día más, es por eso que la iglesia desea llegar a un punto medio, un camino común entre ambas vías, lo que en síntesis es hacer crecer la conciencia ética.
La organización mundial de la Salud apoya la eugenesia, estableciendo algunos alcances con respecto a esta, pero afirmando que el fin de la eugenesia es mantener lo más baja posible la sobrecarga de enfermedades, aunque estas no puedan ser eliminadas al cien porciento ya que existen las mutaciones espontaneas así como también pueden ocurrir las uniones entre heterocigotos, por lo tanto se seguirían dando nuevos casos, pero esta ayudaría a disminuir la frecuencia de las enfermedades hereditarias.
Con respecto a lo anterior, se afirma que convendría disuadir a aquellos casos que posean enfermedades hereditarias por medio de la educación y consejos, pero nunca por coacción.
Respecto a la ética, lo más común es escuchar que la eugenesia siempre conlleva a medidas que resultan poco éticas, mas aun cuando se le compara con los asesinatos realizados por Adolf Hitler y todo lo acontecido en aquel entonces, determinando que siempre hay un genocidio de por medio en la eugenesia. Todo esto pensando en el conjunto de cosas que involucra la eugenesia, independiente de los aspectos positivos, ya que este análisis extraído principalmente de lo dicho por H. L. Kaye y R.L. Hayman, alude a la eugenesia vista en su desenlace, es decir, que siempre termina en lo mismo.
La valoración moral es bastante subjetiva, ya que como hemos dicho la eugenesia posee dos caras, la mala y la buena, o para establecer una valoración habría que hacerlo de manera específica en cada aspecto de esta filosofía social. Sin embargo estableceremos que merece ser tomada en cuenta debido a que el objetivo que persigue técnicamente es bueno para todos, el cuidado hay que prestarlo al momento de ver como se conseguirá dicho objetivo.
La eugenesia es un practica de mucha controversia en la actualidad, que pese a llevar mucho años en aplicación nunca se ha aclarado que aspectos involucra o como define ciertos conceptos tales como, “mejora” o “defecto genético”, o como desea alcanzar su objetivo de "mejorar la raza". Se le ha relacionado con sucesos como la Segunda Guerra Mundial, específicamente con los asesinatos que realizó Adolf Hitler, lo que ha traído como consecuencia que la eugenesia haya sido abandonada por ciertas organizaciones. Sin embargo la eugenesia positiva sigue formando parte del mundo entero y regulado por organizaciones de carácter supranacional, con el objetivo de desarrollar las actividades eugénicas que realmente sean productivas para la raza humana.
Teniendo esto en consideración podemos concluir que la eugenesia es un filosofía digna de ser estudiada y que merece oportunidades para demostrar que es lo que realmente quiere y como lo conseguirá, llegando a un consenso con la iglesia, la ética, la moral y la conformidad mundial.